Osteopatía para mejorar la calidad de vida.
Capaz de mantener la normalidad estructural y funcional del cuerpo, evitando posibles dolores y alteraciones futuras. Este es el principal objetivo de la osteopatía, la disciplina terapéutica que consiste en realizar un conjunto de técnicas manuales y tratamientos no invasivos para tratar y prevenir lesiones de distintos tipos, ya sean musculoesqueléticas u osteoarticulares. El principio fundamental de la osteopatía es comprender el cuerpo humano en su totalidad, en el sentido de comprender que huesos, músculos y ligamentos forman parte de un todo: trabajan juntos y por tanto deben abordarse juntos. El cuerpo humano es una unidad completa y no sólo un conjunto de órganos. Así, la osteopatía concibe al cuerpo humano como un organismo con capacidad de desarrollar sus propias soluciones a muchos de sus problemas; sin dejar de lado, en ningún caso, el método terapéutico y diagnóstico de la medicina científica. La base siempre serán los masajes y la correcta manipulación de las articulaciones. Al estirar y masajear los músculos, las articulaciones y los tejidos conectivos del cuerpo humano, la osteopatía restablecerá el equilibrio orgánico y su capacidad de autorregulación. Y estos aspectos son los que favorecerán la recuperación y la prevención de lesiones y dolores. Reparación y prevención La osteopatía no se contenta con curar una lesión. Esta técnica terapéutica buscará el origen de la enfermedad, analizará sus múltiples posibles causas y trabajará para fortalecer lo que se conoce como 'homeostasis'; Es decir, la capacidad del cuerpo humano, como organismo vivo, de mantener condiciones favorables para realizar sus propias funciones orgánicas.
Seguiremos haciendo todo lo posible que esté en nuestras manos para mejorar la calidad de vida de todas las personas que nos visitan.
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